Apenas faltan tres semanas para la llegada de mi nieto Axel y su habitación casi está ya lista. Faltan algunos detalles, como pintar la mesa infantil que fue de su madre y su tío, cosas que he guardado durante estos años.
La cuna que fue de ellos también la guardé y la usaré en mi casa cuando me lo traigan a dormir diariamente en cuanto mi hija se reincorpore al trabajo, puesto que ambos tienen turno nocturno en Correos.
Volveré a cambiar pañales y dar biberones, a cantar canciones infantiles; a pasar gustosamente noches en vela cuando le salgan los dientes. Esto rejuvenece el alma, amigos, la ilusión es indescriptible.
La cuna y el cochecito.
Cuando hice esta foto, aún no habían fijado en la pared las palabras que han elegido, simplemente están pegadas con cinta adhesiva para señalar su posición.
Ahora sí, ya están impresas en la pared. Muy cosmopólitas ellos, están en inglés y pone "Nunca caminarás solo". Muy poético, pero no me acaba de gustar porque parece que no tengan intención de que madure y camine por su cuenta. ¡Uf!
Este mural está al lado de la cuna, junto a la bañera.
Resulta que este dibujo lo encontré en una revista de labores, me gustó mucho y se lo dije a mi hija, pero bordarlo a punto de cruz para un cuadro me supondría meses y meses de interminable labor y todavía no he acabado de tejer los dos conjuntos de jersey, pantalón, botitas y gorro. Me falta un pantalón y medio, estará a tiempo, pero de momento no doy para más.
¡Qué sorpresa al ver que habían encontrado el mismo dibujo para fijarlo en la pared! Son como calcomanias, parece que estén pintados sobre ella. Queda precioso, mejor que cuadros enmarcados.
La cuna y... ¿su primer amiguito? No. Ha llegado hace unos días quien será su compinche de fechorias y barrabasadas, je je je...
Sus papis han adoptado una gatita nacida el 11 de abril, un renacuajo diminuto pero que no para un momento:
Se llama Roma, nombre elegido por mí y aceptado por ellos. Mi yerno tiene fijación por la historia de Roma y ya al niño pretendía llamarlo Agripa o cualquier nombre romano de la antigüedad, algo que le quitamos de la cabeza mi hija y yo, horrorizadas, conque dijo que si el niño no, la gata sí. Y venga barajar Agripina y otros horrores, hasta que mencioné Roma. ¡Anda! no se les había ocurrido. Asunto solucionado y respiro de alivio, je je je...
El armario y la butaca.
Cuando hice la foto, el tapizado de la butaca estaba en la lavadora.
Aquí ya lista.
La bañera y vestidor.
Lo que hay al lado es la mesa infantil de mis hijos que aún hay que pintar de blanco, por esto se ven trastos encima, bolsas y pinturas.
Roma es ahora mismo la protagonista absoluta a falta de la llegada de Axel. Esperemos que no tenga celos; mi hija asegura que no le va a dar tiempo, pero mi consuegra está sufriendo, no para de temer que la gata le arañe los ojos, ¡uf! Esta mujer ánima a cualquiera...
¿DONDE ESTAN TUS ADMIRADORES, VIEJA DECRÉPITA?
ResponderEliminarEn las redes sociales, boba.
ResponderEliminarAllí estamos todos, menos tú, por ser una rata de alcantarilla, aunque ya sé dónde encontrarte...
¿Te crees que sólo publico esto que ves? Desde luego, más tonta y no naces, quesito pestilente.
Lo de aquí lo enlazo allí y ahí me comentan. Pero aparte, allí publico sobre política y temas sociales.
Tú eres como una perra pulgosa, tirada a la puerta de mi blog, intentando que te haga caso y ya sabes que no, que sólo te publico tus rebuznos para reírme de ti. ¡La cantidad de ellos que he fumigado!
A una perra de verdad la entraría en casa, o buscaría alguien que se hiciera cargo de ella, seguro.
Pero tú no le llegas a las pezuñas a una perrita de cuatro patas porque eres una loca, y yo no soy una institución mental. Lo siento.
Dile a mami que te ayude, si es que se acuerda de que tiene una hija...
¡Qué lindo todo!
ResponderEliminarLa verdad es que sí. Tuve mis dudas al principio, cuando me contaban, pero al final ha resultado un buen trabajo.
Eliminar¡Gracias, Dixi!
¿Y dónde quedó esto, que no me he enterado todavía? Vamos, que cuándo tendrás ya que empezar a encargarte definitivamente del nieto.
ResponderEliminarY oye, dicen que no es bueno que las embarazadas estén en contacto con los gatos, que hay un protozoo que puede afectar al feto... pero meh, tampoco vamos a ser tan quisquillosos, ¿no? Jejeje.
Ah, ahora que me fijo... ¿el ombligo tu hija ahí lo tiene para adentro o para afuera, que no lo distingo?
Y ya que estoy te pregunto también: ¿a tu yerno no le habría valido algún nombre latino más "normal"? No sé, algo como Julio, César, Octavio...
En fin, ¿qué hago aquí? Yo tendría que estar estudiando Anatomía Patológica...
El mes que viene estará conmigo, en marzo, fijo.
EliminarEs que lo de la espalda de mi hija no tiene solución (si lo sabré yo...)
Ya, te refieres a la toxoplasmosis, pero esto lo provocan las heces de los felinos y mi hija no ha estado en contacto con el cajón de arena. Todo para mi yerno.
El ombligo está para dentro, hombre.
Deja, deja, mi yerno es retorcido como él solo, je je je...
Cuando la gata, venga soltar nombres horribles, hasta que dije: ROMA, y se quedó como patidifuso, por no habérsele ocurrido a él, ¡juas!
Para el niño tenía que ser algo especial, uf...
Bueno, Anatomía Patológica es tan plasta, que seguro te ha ido bien venir a echar un vistazo por aquí para distraerte un poco, je je je...
¡Encantada de recibirte!
¿Está para adentro? Bueno, es que como la foto no tiene mucha resolución, la línea alba la tiene bien marcada y contrasta con su níveo vientre, pues no se aprecia bien. A muchas embarazadas se les sale para afuera.
EliminarAnatomía Patológica no es plasta, es infernal directamente. La segunda asignatura más fea que he tenido en lo que llevo de carrera (la peor, Fisiología).
Desde luego que echar un vistazo a un post distendido como este me vino bien para desahogarme un poco, ¡uf! Así que el placer es mío.
Ya, es que las fotos están tomadas con el móvil.
EliminarHace años que no uso apenas las dos cámaras que tengo, demasiado trabajo cargar con ellas.
Que te sea leve con esas asignaturas. ¡Uf!