Artículo publicado en Alerta Digital.
El colmo de la invasión islamista es que se obligue a nuestros ayuntamientos a adecuar cementerios musulmanes. ¿Cuántos años hace que nuestros cementerios se han convertido en grandes bloques de nichos por carencia de suelo? Bloques tan altos que los deudos tienen que usar los servicios de alguien que no padezca vértigo para que suba a limpiar y poner flores, sin poder hacerlo personalmente con el mimo y cariño deseados.
Nuestros difuntos quedan fuera de nuestro alcance, teniendo que pagar a alguien que suba allá arriba, mientras lo miramos desde abajo, con el dolor de no poder arreglar las flores, puestas de cualquier manera por el profesional, como quien pone un puñado de palillos en el palillero de la mesa del bar.
¡Ah, pero esto no se aplica a los musulmanes! Los ayuntamientos estarán obligados a buscar tierra -aunque no la haya-, para enterrar a los invasores a su gusto, en el suelo, sin ataúd, en determinada posición y con la tierra formando un montículo, tal cual en la Edad Media. Foco de ratas y epidemias para la población.
¿Están locos los políticos que nos desgobiernan? ¿O sólo son unos necios ignorantes?
A nosotros nos maltratan y humillan, nos dejan morirnos de hambre al quedarnos sin recursos, destinando el dinero de nuestros impuestos a los de fuera y ahora también nos desprecian a la hora de la muerte, destinando suelo, un suelo que no hay, todo el mundo lo sabe, para enterramientos medievales que, como en aquellos tiempos, pueden provocar epidemias.
Su alegre Alianza de Civilizaciones es mortal para nosotros, no sólo porque la alianza es unilateral y los cristianos son perseguidos y masacrados por ellos, sino porque aquí vienen a traer pobreza y enfermedades que nos costó muchísimo erradicar.
Traen pobreza porque nuestros jóvenes emigran a Alemania y donde sea que encuentren el trabajo que aquí no hay, al estar ellos copando el disponible. Traen enfermedades porque está demostrado en los ambulatorios y hospitales que, además de volver las ya erradicadas hace años, llegan otras nuevas, propias de sus lugares de origen y para las que no estamos preparados.
Estos que nos desgobiernan se llaman a sí mismos progresistas, cuando en realidad están trabajando para que la sociedad regrese al pasado más oscuro, a la época medieval de costumbres bárbaras, insalubres, de mortandad por epidemias.
Necios e ignorantes demuestran ser al no ver el alcance de su tontería pijiprogre. Locos por ponernos en peligro mortal.
Y aún tienen la poca vergüenza de llamarnos racistas y xenófobos a quienes tenemos un sentido común del que ellos carecen por completo.
Curiosa noticia, pero no te lo tomes tan a la tremenda.Se enterran en cementerios musulmanes si hubiere terreno, pero no creo que sea el caso de grandes ciudades como Madrid o Barcelona.
ResponderEliminarMe asombras, amigo mío.
ResponderEliminar¿Crees que Caamaño se va a parar a pensar si hay tierra disponible o no?
Me parece que no es de recibo ceder a costumbres de religiones colectivizadoras y medievales como el Islam. La obligación es erradicar esa perversa ideología, no animarla ni consentirla.
ResponderEliminarUysss... pues ven y se lo explicas a los perroflautas y demás ralea...
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