domingo, 20 de enero de 2013

Domingo entre amigas

Bueno, en realidad fue el sábado cuando recibí la visita de una amiga blogueril a quien todavía no había tenido ocasión de conocer en persona. Es estupenda y ambas nos alegramos mucho del encuentro largamente esperado.
Nada más vernos sacó la cámara y se puso a hacer fotos de ambas mediante el método de estirar el brazo delante, je je je... No las pongo, que quiere preservar su intimidad, pero sí pongo esta del regalo que me trajo:


Son piedras curativas y en el correo me envió antes un PDF sobre ellas, el Libro de Santa Hildegarda de Binguen que me voy a empollar.

La piedra azul es turquenita y esta ya la tenía yo, la puse junto a las regaladas cuando hizo la foto que le pedi. La turquenita es la de mi signo, Acuario.
Las dos con cordoncillo y las otras dos que no tienen agujero son jaspe rojo, igual que los dos trozos de una pieza mayor, pero estos sin pulir, tal cual.
Los dos colgantes con plata son jacinto de Compostela y las dos pequeñitas habrá que estudiarlas con lupa porque no nos aclaramos. Mi amiga sostiene que la verde es crisosprasa, pero a mí me parece que no.

Bueno, aún sin mirar el libro de la santa alemana, sé que el jaspe rojo tiene propiedades para alejar el dolor y lo he podido comprobar desde ayer en que me apresuré a colgarme una en la muñeca izquierda. Mano de santo. La mano y el antebrazo izquierdos llevan años tocándome las narices, la mano se duerme y el antebrazo duele mil demonios. Los carníceros con bata blanca pretenden operarme el codo y yo me resisto como leona panza arriba porque la explicación de lo que ocurre no me cuadra en absoluto, esos se inventan cosas que es un disgusto, así que no, a mí no me rajan para dejarme peor.
Por otra parte, el jaspe rojo tiene propiedades contra el mal de ojo, hace de escudo y las rebota contra el lanzador, conque me he colgado otra piedra al cuello, je je je... También sirve para esto el coral y tengo un collar, pero molesta mucho, es incómodo al ser gargantillla y arañar el cuello en toda su circunferencia

Naturalmente, mi amiga no cree en el mal de ojo, sólo en las propiedades curativas porque lo dijo una santa y me parece bien lo que la monja alemana dejó documentado porque es cierto que las piedras tienen propiedades al ser fuente de energía, pero por esto mismo, también actúan protegiendo de maldades porque estas son tan naturales como un pino piñonero.

Y ahora una anécdota. En cierta ocasión, hace ya muchos años, la Bruja Negra de la familia me pidió que fuera a visitar a una bruja de esas que cobran por su trabajo. En su nombre, pagando ella.
Por entonces aún no había revelado su verdadera faz de maldad. Ella no podía ir porque trabajaba de sol a sol y estaba preocupadísima, que su suegra "le había echado una maldición". Siempre llora y le dan patatús, cayendo redonda al suelo.
Me armé de paciencia y acepté hacerle el recado para que se quedara tranquila. Fui a la dirección que me dió. Era una vivienda en un bloque de pisos en Cornellà.
La bruja era realmente horripilante, lo juro. Vestía una bata blanca de médico y se mostraba amable. Pero... ¡sus dientes estaban limados hasta acabar en punta! Teniendo en cuenta que yo tenía que mirar su boca constantemente para hablar con ella, esa visión me dejaba intranquila.
Me retuvo varias horas, no me dejaba marchar. Yo pensaba que le daba la foto según había pedido la bruja, le explicaba lo que se esperaba de ella, le pagaba y me iba.
Pues no, a pesar de no ser yo la peticionaria, quiso que me quedara. Sali al comedor (estábamos en su "despacho", una habitación reducidísima, mientras ella, con los ojos cerrados, hacía girar su mano en círculos sobre la foto), diciéndole que es que me dolía mucho la espalda al estar sentada tanto rato, a ver si podía poner la directa y largárme.
No, allí había un personaje tanto o más inquietante que ella, con ojos de loco y parecía muy dispuesto a cortarme la retirada.
Disimulé dejando vagar mi vista por la estancia. Los muebles eran cutres, de los años 70 y en la vitrina observé extrañada como 30 o 40 copas de pequeño tamaño. Demasiadas para una casa normal, todas iguales. Mi imaginación saltó desbordada. ¿Beberían de ellas sangre los acólitos? ¿De víctimas a las que la bruja desgárrase el cuello con sus dientes afilados?
Ya empecé a hacerme a la idea de que tenía que clavarle un rodillazo en la entrepierna al de los ojos de loco y salir disparada, aunque temía que la puerta estuviera cerrada con llave y de ser así sería el final, cuando apareció la bruja desde su despacho, al tiempo que se abría otra puerta que dejaba ver una camilla y de ella salió un hombre joven y atractivo, también con bata blanca. ¡Coño, tres! Y a saber si había más gente.
La bruja me presentó al joven como su hijo y vi que le pedía que me diera un masaje para aliviarme el dolor de espalda. ¡Peligro! ¡Alerta roja!
Él me miró a los ojos. Yo lo miré. Le dijo a su madre que no y me acompañó a la puerta, dejándome libre por fin. Tonto no era.

Lo que resulta curioso es que en el despacho de la bruja hubiesen estampas de Cristo, la Virgen y santos. No cuadraba con sus dientes limados, para nada.
Las sectas son muy peligrosas y tienden trampas en las que caen personas desesperadas y sin discernimiento, buscando una hipotética salvación al no ser capaces de enfrentarse por sí mismos a los problemas de la vida.


11 comentarios:

  1. No sé mucho sobre piedras. De vez en cuando he leído algo y tengo alguna guardada.
    Me sorprendió hace años que hubiera gente en España que creía en el mal de ojo. Incluso una compañera que era psicóloga, no lo rechazaba del todo. En su entorno se había creído en él y ella no lo rechazaba.
    Tengo mucha fe en San Judas, y no desde hace muchos años. Apareció en un momento muy crítico, y lo cierto es que se solucionó lo que no tenía fácil solución. Digo que apareció, porque apareció una estampa en el bolsillo de una camisa que llevábamos puesta en el momento que habría una carta que decía que el problema era prácticamente imposible de solucionar. No pude por menos que agarrarme al Santo y no lo suelto.
    Al final, no sé si todo se puede reducir a que “la fe mueve montañas”.
    Las piedras transmiten energía… la mirada transmite energía para bien o para mal… los santos pueden aparecer en los momentos que más los necesitamos… ¿Todo es fruto de nuestra imaginación? ¿Todo es fruto de nuestra sugestión? ¿Nuestros sentidos son los únicos capaces de percibir la realidad? ¿Son capaces de percibir toda la realidad?
    De todas formas hay gente que no cree en nada, no respeta nada, y además de no respetar las creencias del resto, se aprovecha de ellas y las utiliza para que la gente se comporte de una determinada forma y para enriquecerse a costa de la fe de estas personas. Sí, hay que tener cuidado.
    Lo de los dientes acabados en punta tiene lo suyo, juaggg.

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  2. El mal de ojo existe, Rosa. Es cuando alguien te odia tanto que proyecta su maldad contra ti, todos sus malos deseos.
    No se trata de algo generalizado, sino que proviene de alguien pertinaz que te ha tomado entre ceja y ceja y no vive sino para ello. Suelen ahogarse en su propio odio, tienen una vida desgraciada al dedicarse a esto con toda su alma.
    Pero que sean unos pobres desgraciados no impide que su energía malévola cause mal, por ello es necesario protegerse cuando aparece un demente así.

    San Judas Tadeo es patrón de las causas dificiles y si apareció, aunque fuera en estampa, es porque crees.
    A mí se me apareció mi difunto padre, para indicarme dónde estaba un documento desaparecido que mi madre necesitaba para cobrar la pensión de viudedad. No importa un santo que otra persona cualquiera, pues ambos estuvieron vivos, existieron, y su bondad les hace ayudar a los que seguimos aquí.

    No, no es fruto de nuestra imaginación porque mi ex nunca ha creído en estas cosas y sin embargo, tuvo que claudicar al haber sido testigo de ellas en casa, de las visitas de mis difuntos.

    Sobre los dientes limados, no es nada agradable, te lo aseguro, y no comprendo el motivo, a no ser el que sospecho, aunque tampoco tiene mucho sentido. Vamos, que en un pueblo perdido puede, pero en Cornellà y en un bloque de vecinos, no es fácil desprenderse de un cadáver desangrado. Será mero disfraz, pero como he dicho, no cuadra con las estampas de santos y Cristos.

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  3. El pedrusco dormido22 de enero de 2013, 16:38

    Yo no creo en la energía abstracta. Los minerales como otros elementos tienen unos componentes químicos y también pueden actuar físicamente. Una "micromicicra" puede hacer efecto. Ignoramos cómo.

    Rosa, ¿tú has oído hablar de al radioactividad? Parece ser que el granito al tiene. No para bien pero al tiene. Tengo familiares que les duele hasta el apellido y que van a la sierra y están como un jilguero. El problema, de momento, es no saber cómo actúan determinadas piedras. Se observa y se toma nota. Hay médicos en esto.

    Conozco quien se las pone como una tirita, se les pasa el dolor y hasta otra.

    No creo en cosas raras, pero sé que el diablo existe y, aunque limitado tiene poder si uno le deja la puerta abierta. A una amiga le hizo daño y gracias a un sacerdote que no sé qué bendiciones le dio y la peregrinación que hizo está repuesta. como si le hubieran dado la vuelta al calcetín a toda su vida completa.

    Lo que sucede es que estas cosas no las cuenta la gente. se suele decir que se cree en tarot y cosas pero el Patas lo tiene tan bien montado que nadie habla de él, ni algunos sacerdotes y eso que su existencia es dogma de fe.

    Sta Hildegarda, cuyos escritos se están traduciendo o editando hablaba de muchos remedios ¡en el siglo XII!. Algunos los hemos usado todos en el condimento de la comida, las especias, las hierbas, etc. Quienes no somos tan jóvenes sabemos que lo que ahora te dan en al botica o ne el herbolario en nuestra infancia era una infusión doméstica. A mí misma una doctora que tuve que era encantadora, en vez de tira de receta por sistema, me daba remedios caseros: no te doy nada apra la tos porque es necesario toser, ponte una cebolla picada en la mesilla. O para esa faringitis procura hacer gárgaras con agua sal y bicarbonato y me escribía cómo. la sal, cloruro sódico, y el bicarbonato de sodio son... ¡minerales! Y el agua que se bebe no es solo H2O sino que lleva minerales disueltos que hacen que sea mejor o peor.

    Hace unos días me rebañé el meñique y empezaba a sangrar, lo acerqué a un trozo de alumbre -silicato de alumino, creo que es, que tenía de cuando encuadernaba, me cortó la hemorragia y la desinfectó. Es un antiséptico que usaba molido para que el engrudo de pegar o la gelatina que hace que el papel que he lavado no sea secante se pasto de todo bichejo. Es un remedio antiquísimo, ahora no se comen las cosas industriales, peor antes era así. Si hasta el oro que se aplicaba a los libros de lujo -¡todos lo libros eran un lujo!- no tenía finalidad ornamental sino cuidar que no entrara polvo ni bichos y que duraran. ¡Y vaya que si duraron!

    En cuanto a los milagros los hace Dios. el buscar la intercesión de un santo es algo bueno peor no puede tomarse como una superstición: le rezo tal al santo y tengo esto... como un cajero automático. Es distinto, más complejo y a la vez más sencillo.

    sí hay que tener cuidado con quienes quieren engañarnos. El menor mal, y no es poco, que podrían hacernos sería el que nos sacaran un poco de dinero.

    hay gente que no sabe la causa de tener todos los males del mundo y puede ser eso: una maldición llevada al límite.

    Se han perdido costumbres como llevar una medalla bendecida o tener una pequeña imagen o el uso del agua bendita... no es superstición, es poner las cosas en su sitio, venerar lo venerable nada más.

    Teresa, me pilló el comentario de Rosa y estar pcupada por muchas cosas y dormida. Otro rarto contesto a lo tuyo.







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  4. Je je je... qué gracia me hace este nick, "El pedrusco dormido".

    Vale, esperaré a que comentes lo que digo.

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  5. Lo cierto es que prefiero no pensar en maldiciones, ni males de ojo, ni energías negativas. Me agarro a lo que creo que puede ser beneficioso: una piedra, vale una piedra.

    La primera vez que oí que alguien se tomaba en serio el mal de ojo tenía más de veinte años. Me explicaba una compañera que cuando mirabas a un bebé, por ejemplo, ellos tenían por costumbre decir: “¡qué Dios le bendiga!”, porque creían que, sin querer, se podía sentir envidia y producirle algún mal al niño. Me comentaban cosas así. No es que no crea en el mal de ojo, es que no me lo planteo.

    Llevar medallas es algo que he visto siempre, de hecho llevo un crucifijo colgado, más por recuerdo que por otra cosa y, hasta cierto punto, me da la sensación de protección.

    El utilizar a los santos como cajero automático es algo que he practicado y me ha dado buenos resultados. Yo rezaba a San Antonio cuando me desesperaba porque no encontraba algo, y en cuanto empezaba a rezar el padre nuestro aparecía el objeto en cuestión. Sí, cual cajero automático, pero me ha funcionado muchas veces. Creo que no me ha fallado nunca. Buscando cosas que sabes que tienen que estar, claro. No parece que tenga mucha base teológica. Cualquier sacerdote dirá que son tonterías. A mí, me ha funcionado.

    A San Judas nunca le había rezado. Tal y como he comentado apareció su estampa y no nos explicamos cómo en un momento límite. Así que ahora sí, llevo estampas que he comprado, tengo su figurita por partida triple colocada donde considero que está cerca y bueno…

    En cuanto a los remedios caseros, efectivamente se han estado utilizando cuando no había otros remedios y daban buenos resultados. Incluso ahora mismo que hay tanta farmacia y tanta industria farmacéutica, las herboristerías no se quedan atrás. Hay mucha gente que busca ese tipo de remedios y les funciona.
    Nada como la manzanilla, el limón y la miel para un resfriado.

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  6. El pedrusco dormido22 de enero de 2013, 22:26

    Cata, ando ¡otra vez con el pc estropeado! a ver cundo respondo.

    Rosa, disculpa, que te fuera aparentemente todo para ti, te trato menos. Dijiste:

    "Me sorprendió hace años que hubiera gente en España que creía en el mal de ojo"

    o no creo en sentido estricto, pero sí que el diablo existe y puede hacer daño. Lo mejor no ponerse a tiro con cosas raras de nicromancia y cosas de esas que no me gustan nada y ahora se llevan tanto, tarot, horóscopos, consultas a brujos... confieso que em da cierto miedo. Además incomprensiblemente abusan de las imágenes religiosas. Muy raro. Bien sabes que una imagen no es un amuleto y aunque se lleve por costumbre se hace con rectitud de intención.

    Lo del cajero, no te lo tomes a mal. Es que a Dios y a los santos también hay que acudir en lo bueno. Y si dios permite que San Antonio y San Judas te tengan así de mimada, pues por algo será

    Dices "la mirada transmite energía para bien o para mal…" Una mirada pues no transmite nada raro, digo no natural. Puedes transmitir dulzura comprensión odio, etc. pero de ahí a hacer daño, un abismo.

    Quizá nos estemos, o me esté, pasando de tema, Rosa. No nos conocemos y puede haber equívocos.

    De su intercesión, de los santos, canonizados o no, pues es algo como muy de sentido común. Si cuando estaban en la tierra eran amigos de sus amigos y tenían más limitaciones, cómo no nos van a ayudar, si lo que pedimos nos conviene y dios así lo quiere.

    No sé si vienw a cuento o no, pero algo has dicho de las bendiciones. Hay un ambiente muy agresivo y la lengua puede aumentarlo o reducirlo. Los saludos, como sabrás, son "Buenos días (nos dé Dios)". Adiós, viene de A Dios, fórmulas que expresaron buenos deseos para los demás. a mí me parece que se retroalimenta, si uno desea el bien hay más bondad y a más bondad, mejores deseos. Los buenos deseos salen del corazón.

    No sé cómo voy a andar con el pc, que se ha arreglado hace menos de una semana pero algo se ha roto, pantallazo azul... y no sé cuanto durará. :_( pero es un placer conocerte.








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  7. Ya es mala pata lo de tu PC, parece la historia interminable.

    Oye, que ha venido mi hijo y hemos hablado de las piedras. A él también le gustan los minerales y tiene una colección.
    Dice que el jacinto de Compostela es cuarzo y ha querido mostrármelo. Pero se ha puesto a buscar por todas partes, en la biblioteca, su habitación, debajo de la mesa del estudio, donde hay un par de cajoneras... Al final le he preguntado qué narices buscaba porque no lo decía. "Mis piedras..." ¡Ja ja ja! Están en sus cajas debajo de las montañas del belén que todavía no he desmontado.

    Tendremos que esperar a que lo quite para estudiar minuciosamente las piedras. Nos lo pasaremos muy bien.

    Un beso y que no sea nada lo de tu equipo.

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  8. Igualmente, pedrusco dormido,ha sido un placer conocerte.

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  9. Sin pretender dar la brasa, simplemente que espero que si no se te ve por los blogs sea porque estás haciendo cosas más importantes y entretenidas.

    Se te echa de menos.

    Un abrazo y a ver si empiezas a dar zarpazos cuando puedas y tengas ganas.

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  10. El pedrusco dormido1 de febrero de 2013, 19:21

    ¡Cuánto se te echa de menos!

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  11. Mil gracias, queridas amigas, Rosa y mi "pedrusco dormido".

    Ya estoy de vuelta y con ganas de retomar la lid.
    Me he acordado de vosotras y de los demás amigos durante estos días -una semana y media, mucho para mí.-

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