Salvador Ramón, un catelolán que afirma visitar Port Aventura desde hace más de diez años, ahora va y se cae del guindo, quejándose de que los empleados de estas instalaciones "no le contestan en su lengua".
Animal de bellota, yo en Cataluña me expreso en catalán, pero ni me entero de en qué lengua me responden porque mientras la entienda me da lo mismo. Ellos me han entendido a mí y yo les entiendo a ellos. Punto y final.
Afirma el cateto con barretina que no piensa volver a Port Aventura hasta que no le contesten en catalán. Pobrecito, va apañado. Siendo una empresa que recibe cantidad de extranjeros de todas partes, a mi no es que me importe que haya personal dominando el inglés, francés o alemán, para esto están.
¿Que no dominan el catalán? Bueno, oiga, que con el castellano van que chutan.
Se trata de entenderse, no de hacer un concurso de idiomas.
Hasta las narices de chulopiscinas exigiendo algo de manera que sólo consigue ser rechazado y odiado.
Me cago en su puta madre, cuando yo era pequeña, mis vecinos andaluces, murcianos y extremeños querían que les enseñase catalán, la mar de contentos. Y no me refiero a niños, sino a sus padres y tíos.
Esta gentuza ha conseguido que mi lengua sea odiada por querer imponerla por la fuerza, por apartarse creyéndose superiores.
Mal rayo los parta.
Lo que tendría que pensar este individuo es el por qué los que piensan como él han fomentado la inmigración (y la natalidad también) de forma masiva en Catalunya los últimos 12 años(en vez de fomentar la natalidad autóctona), con lo que el uso del catalán se ha reducido considerablemente, primero que empieze por aquí y deje de echar balones fuera. Por otro lado no se que esperaba de Port Aventura, unas instalaciones turísticas por donde pasan miles de turistas al año, es lógico que se utilize más el castellano por el simple hecho de que es más internacional, su demografía es mucho mayor, es algo que surge de forma natural. Hay que ser hipócrita y obtuso.
ResponderEliminar¿Qué se puede esperar de los catetolanes, sino que sean obtusos? Hipócritas lo son por añadidura.
ResponderEliminarNo tienen remedio, Fdelga.
La lengua es una herramienta de comunicación. El nacionalismo pretende atribuirle una carácter esotérico al no poder usar la raza.Lo lógico en sitios de gran afluencia de turismo es que se hablen los idiomas internacionales por puro motivo ecónómico, ya que si tuvieran que hablar a cada cual en su lengua, hay que pensar que en el mundo hay seis mil lenguas y sólo seis idiomas internacionales.
ResponderEliminarLos catetolanes aspiran a comunicarse sólo entre ellos, Bucan.
ResponderEliminarQuieren formar parte de un gueto aunque crean lo contrario.
Más tontos y no nacen, los pobres.
Exacto Leona, esa es la contradicción, expansionismo y sectarismo al mismo tiempo, según les conviene, por eso en vez de avanzar, retroceden contínuamente, yo creo que en el fondo tienen un conflicto psicológico serio.
ResponderEliminarJe je je... Vamos, que están como chotas, querido Fdelga :D
ResponderEliminarEn serio, es fácil darse cuenta de que no razonan correctamente.
Hi ha molts talibans d'aquest. No es donan conta de que el castellá es la llegua majoritaria en Catalunya. Ho parlan el 100% dels catalans.
ResponderEliminarJusta la fusta!, Periódico.
ResponderEliminarEl 100% de los catalanes hablan castellano, ¡juas!
Y el 5% no se entera de que es así aunque formen parte, je je je...
Desde mi punto de vista, las dos lenguas (catalán y castellano) son oficiales en Cataluña. Lo ideal sería que los empleados de Port Aventura, como los del Tibidabo, el Zoo, el Aquàrium y otras instalaciones, sobre todo si han de atender al público, dominaran las dos lenguas, además de, como mínimo, una lengua extranjera. De este modo se daría un mejor servicio.
ResponderEliminarEn realidad, se supone que es así, Fernberg.
ResponderEliminarPiensa que este señor no se ha quejado sino al cabo de diez años y como la empresa dice, se trató de un error.
Ignoro de donde salió el error, pero que el fulano dé su nombre y apellido para ciscarse, pues mira, muy normal no es. ¿No te parece?