Me importa un pimiento si fastidio el argumento a quienes no la han visto, me ha gustado y quiero comentarla. Con no seguir leyendo, listo.
El abogado (Ben Afleck), joven y peripuesto, creyéndose un crack de la profesión por ser socio del bufete de su suegro, provoca un accidente de tráfico por las prisas de llegar al juzgado en un caso muy importante. El afectado (Samuel L. Jackson), también iba al juzgado por motivos personales, mantener el contacto con sus hijos al haberle pedido su mujer el divorcio y teniendo la intención de trasladarse a otro estado con ellos.
El abogadillo se las pira sin prestar ayuda ni hacer el atestado de la compañía de seguros. Primero le ofrece un cheque al negro, ¡ay! los que tienen pasta gansa... Este se niega, quiere papeles en regla y el guaperas lo deja tirado, sin siquiera acceder a llevarle en su coche, ya que el otro estaba descuajeringado.
Lo bueno es que al hacer el cheque, el atontado saca de su portafolios una carpeta muy importante para lo que va a hacer en el juzgado y esta se le cae al suelo sin enterarse. ¡Waooooooooooooo! Intriga al canto.
Naturalmente, el negro la recoje mientras lo ve marchar, impotente.
Ahora viene lo que me deja a cuadros. Cuando el abogadillo se da cuenta de su cagada, en vez de decir la verdad a su suegro, le suelta un rollo patatero, asegurándole que el juicio ha ido estupendamente o_0
A mí nunca podrán acusarme de mentir, es más, según mis amigos, hablo demasiado. Pues vale, pues de acuerdo, pero mentir nunca, es algo que no soporto.
La trama sigue con el abogado intentando recuperar sus documentos, y para ello no se le ocurre otra cosa que usar las labores de un delincuente cibernético para que declare al negro en bancarrota en internet para forzarle.
Memorable la escena en que éste va al banco donde ya le habían concedido un crédito el día anterior para comprar una casa para su familia y cuando el empleado le asegura que no es posible, que consta en bancarrota y asegurar él que se trata de un error, el empleado le contesta que bueno, que si se trata de un error, en tres meses lo sabrán "porque lo pone en el ordenador"... Nuestro prota coge el ordenador y lo tira contra la fachada: "¡Ya no lo pone!"·
Lástima, yo no tengo fuerzas para hacer algo así, aunque ganas no me faltaron en su día, cuando el Barclays Bank me negó mi saldo, asegurando que tenía una deuda pendiente, deuda que yo ya había saldado hacía tiempo, pero que seguía constando en sus ordenadores. Tuve paciencia, pero no me reprimí en dejar una sutil amenaza: "Esperemos que el error se resuelva pronto, porque si no, ustedes tendrán que pagarme intereses". Al día siguiente recuperé mi saldo y anulé la cuenta. ¡Juas!
La peli es interesante porque ambos protas tienen un pasado. Al parecer, el negro le daba a la botella y de ahí los problemas con su mujer, pero en la actualidad lo ha dejado y es un padre responsable, interesándose por sus hijos, de ahí su furia al ver la jugada del abogadillo con su cuenta.
En cuanto a este, ¡ufff!, lo normal con gente de esa calaña, chanchullo va, chanchullo viene, infidelidades matrimoniales incluídas, igual que su suegro
No voy a contar el final, pero es muy bueno. 20 minutos le debía el abogado al negro debido al accidente que no le permitió llegar a tiempo al juicio con su mujer por la custódia de los hijos. Y 5 minutos que le pide el guaperas a la esposa de éste antes de que se de el piro con sus hijos a otro estado.
¡Oye! Pinta genial... Próxima peli en mi cargador... :-)
ResponderEliminarTe la recomiendo, Rackham :)
EliminarMe parece que la he visto, pero no lo recuerdo bien. Como ahora en television se ven siempre varias cosas a la vez, no te enteras de nada.
ResponderEliminarHombre, eso de mirar varias cosas a la vez, seguro que no te permite enterarte de nada, je je je...
EliminarRecuerda el refrán: "Quien mucho abarca, poco aprieta". :D