Montilla, su penosa campaña para el 28-N

Este cartel lo hicieron sus Juventudes Hitle... digooo... las de su partido. Pasa que contenía un error y el compañero ZP Nunca Mais lo corrigió. Cuando fui a decirle que se lo birlaba, respondió que vale, que birlase, pero que me pusiese una pinza en la nariz. Tranquilo, chico, estoy acostumbrada a individuos más pestilentes.

Lo que es yo, el cartel de marras no lo he visto por ninguna parte. ¿Se atreverá a ponerlo -el original- en la campaña? Todo es posible con un individuo igual de tarado que el zapatillas, creyéndose un super héroe de cómic.

El nazi Montilla se ha pasado toda la legislatura persiguiendo la lengua española sin misericordia. Con la colaboración "desinteresada" de Santiago Espot y sus camisas pardas de Catalunya en Acció que se dedican a peinar las calles a la caza de comercios en que el nombre en catalán no sea como mínimo el doble de tamaño que el rotulado en castellano. Unos 400 € te clavaban de multa el año pasado. Ahora creo que van por los 600. Todo sube, menos nuestros sueldos y pensiones que disminuyen hasta que tienes que sacar la lupa de juguete del niño.

Porque demostrar que también has rotulado en catalán no te sirve de nada como puede verse en la imagen de aquí, ya que te fríen a multas igual. Eso sí, rótula en chino mandarín o en árabe y olvídate del catalán, que entonces no pasa nada.

Ahora, de cara a las elecciones, ha soltado no sé cuántas chorradas intentando congraciarse con los castellanohablantes. Los políticos de profesión, los que carecen de ella entre el mundo laboral, cansan y aburren en sus campañas. Les da lo mismo decir cinco que ciencuenta. Mienten sin inmutarse y sus hooligans les aplauden enfervorizados sin tener idea de lo que dicen, pero bueno, "¡Viva er Betis manque pierda!"...

Va el paleto de Iznájar intentando vender bonos "patrióticos" para conseguir pagar lo que debe en nombre de Cataluña. Sólo el nombre de "Bono" ya pone los pelos de punta... En cuanto a lo de "patrióticos", vamos a dejarlo porque si cuenta con los cuatro gatos escaldados independentistas, ya puede ir preparando la sartén para comérselos con patatas.

Hace unos días prometía pagar 633 € mensuales a los Ni-Ni (jóvenes que ni estudian ni tabajan) hasta los 25 años de edad. ¿Este boniato sabe cuantos hay en Cataluña? No. Evidentemente no, ni idea. Es igual, no piensa cumplirlo. Es el mismo engaño que Zapatero con sus 400 € mensuales a los parados, el "cheque bebé" la ayuda por dependencia y la de independencia juvenil. Humo.

En el extranjero ya nos miran con lupa, no sólo por mindundis, sino por mangantes y cada vez que nuestras acémilas hablan de economía lo estudian y destripan de arriba abajo. En esta ocasión ha sido desde España, pero ello no quita que la evidencia salte a la vista, puesto que GurusBlog se guía por los estudios de Mody´s.

Montilla lleva desde marzo intentando hacer el timo de la estampita para conseguir fondos al haber dejado Cataluña en bragas. Al ser la comunidad autonóma menos solvente -junto a Andalucía-, no ha conseguido que los bancos más importantes compren sus cromos de Bollicao porque, con razón, temen que sus clientes salgan perjudicados.

"Si la Generalidad ha tenido que acudir al mercado minorista para colocar los bonos y no al mercado institucional, es por algo, entre otras cosas porque tiene uno de los peores rating de todas las comunidades autónomas", señalan los analistas.

A continuación cito algunos de los motivos por los que se aconseja no dejarse timar.

1. La Generalidad tiene la caja vacía

Esta emisión de bonos es "a la desesperada", ya que intenta cubrir como sea una necesidad de liquidez a pocos meses vista para pagar proveedores y nóminas. Éste es el motivo del anormal tipo de interés pagado (4,75%) y las comisiones recibidas por bancos y cajas (3%). Sólo a modo de ejemplo, hace tan sólo unos días la Generalidad tuvo que aplazar el pago a las farmacias 24 días y en junio tuvo que aplazar 15 días el pago de 440 millones de euros a las entidades sanitarias que funcionan en régimen de consorcio por una situación de "tensión temporal" de tesorería.

2- Nadie quiere financiar a la Generalidad

Este bono llega al cliente particular no por la generosidad de Montilla, sino por una cuestión de necesidad extrema. ¡Nadie ha querido financiar a la Generalidad! No ha conseguido colocar ni una sola emisión desde marzo por la creciente desconfianza de los mercados, acelerada por los informes negativos de las tres grandes agencias de calificación de riesgos, que han rebajado la nota de la deuda de Cataluña, muy por debajo de la de la deuda española. Ante esta situación, la Generalidad se encontró con la necesidad de financiar 5.000 millones de euros, y realizó diferentes intentos, con escaso o nulo éxito.

3. La emisión carece de garantía estatal

Los bonos que emite la Generalidad sólo cuentan con la garantía de los ingresos y capacidad de pago que ella pueda asumir, en ningún caso con la garantía del Estado. Esto ha provocado en las entidades financieras un nivel elevado de desconfianza hacia la capacidad real que tiene la Generalidad para devolver el dinero prestado. Y es que, aunque improbable, la posibilidad de impago no se puede descartar, a la vista de las cifras presupuestarias: los ingresos no financieros han caído un 8% interanual hasta septiembre, mientras que la deuda ha crecido un 30%.

4. El particular asume un riesgo excesivo no explicado

El riesgo de este bono no corresponde con el 4,75% que se va a pagar, sino con el 7,75% de la emisión (4,75% pagadero al tenedor del bono más 3% de comisión para la entidad financiera), por lo que, realmente, los inversores están asumiendo un mayor riesgo del que realmente se explica o puede conocer el particular.

7. Falta de liquidez

A diferencia de la mayoría de depósitos, que pueden ser cancelados en cualquier momento de la vida del producto, recuperando el importe principal depositado y sólo perdiendo gran parte de los intereses generados, este bono de la Generalidad NO es cancelable durante la vida del mismo.

No es necesario seguir, todo está en el enlace a GurusBlog, perfectamente entendible para cualquier profano en economía.

La conclusión que se saca es aplastante: Cataluña está en la ruina total, la Generalitat no tiene ni para cambiar bombillas fundidas. Y ahora, lo que pretende es hacer una estafa sea como sea, sacando dinero de debajo de las piedras.

Espero que los "valientes" catalanes independentistas se mojen la oreja y regalen su dinero a un estafador que se cachondea de ellos al vivir a cuerpo de rey y llevar a sus trillizas a un liceo alemán que, el único idioma catalán que conocen es el catandaluz de su padre a la hora de comer porque en su liceo estudian en español, inglés y alemán exclusivamente.

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