domingo, 26 de diciembre de 2010

Una evidencia incuestionable: ¡elecciones ya!

De unos años a esta parte vivimos una situación kafkiana, nada de lo que sucede en España es normal y sin embargo, buena parte de la sociedad se ha habituado a ello, arrastrados por la inercia del estupor y la impotencia.

El comportamiento y la actitud de Rodríguez Zapatero no se lo consentirían a ningún Presidente de Gobierno de cualquier país que se precie. Este hombre va alelado, vagando cual ánima en pena por los pasillos y cuando abre la boca es para decir cosas que te dejan sorprendido por lo infantiles, como lo de anunciar que sólo su mujer y un miembro del PSOE sabe si se presentará o no a la reelección. Niñerías para llamar la atención.
Mientras tuvo popularidad andaba con su sonrisa eternamente pegada a la cara, haciendo y deshaciendo despropósitos, enfrentando a la sociedad, crispando, escarneciendo a unos y favoreciendo a otros, cual reyezuelo de cuento.

Ahora que todo el castillo de naipes se derrumba y hasta sus socios, los del clan de la zeja le dan la espalda; cuando no puede aparecer en público sin ser silbado y abucheado; cuando en Cataluña ya ha recibido una soberbia patada en las posaderas de Montilla; cuando es evidente, sin trampa ni cartón que la siguiente patada la notará en las suyas propias, se ha derrumbado. Y su mentalidad infantiloide y ególatra le ha dejado en estado de choque.

POR ANTONIO LAS HERAS. Existen dos tipos de psiquismos: el adulto y el infantil. Esto nada tiene que ver con la edad cronológica. Hay adultos de quince años de edad y mentes infantiles que ya pasaron los sesenta años. El psiquismo infantil está atrapado por el pensamiento mágico: presupone que siempre hay soluciones fáciles que están a cargo de otros que se hallan dotados de algún poder especial. Siempre espera que alguien o algo superior llegue para salvarlo y resolverle los problemas, dándoles fácil solución a los asuntos que lo angustian. Anhela que sean otros quienes actúen en su beneficio, tal como hacen los padres con sus hijos.
Rubalcaba es quien ha ocupado el lugar de Zapatero-infantil, todos podemos verlo. Pero, ¿es esto justo? ¿Es ético? Rotundamente no. Un país no puede estar gobernado por una mente infantil. Es un suicidio colectivo.
Se hace de todo punto necesario convocar elecciones ante la evidencia incuestionable de que quien nos rige no está capacitado para ello. No podemos pasarnos año y medio con el cuento de que sea Rubalcaba quien gobierne "de mentirijillas", hay que acabar con los juegos del PSOE y pasar a ser un país serio y responsable.

2 comentarios:

  1. Desde luego es un problema, pero no menor que un jefe de la oposicion que no se atreve a presentar una mocion de censura

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  2. Por supuesto, Periódico. Es inevitable, pero no por ello hay que dejar que siga este porque las consecuencias son devastadoras.

    Si no hay oposición responsable, nosotros debemos ser la oposición e, igual que echamos a este, el otro tiene que tener claro que seguirá el mismo camino si no lo hace bien.

    Nada de aplaudir con las orejas, hay que imponerse porque los dueños somos nosotros, ellos son nuestros empleados. Y el Rey igual, todos cobran de nosotros.

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