martes, 19 de marzo de 2013

La creencia de los asnos







Wert cree que "hay una percepción social exagerada" de la corrupción

Me ha dejado de piedra el andoba, anda que no. ¿Exagerada? Constatamos diariamente que la corrupción es el pan nuestro de cada día, tenga el color que tenga y ello desde hace tantos años que parece que hayamos nacido ya con ella los que somos más que talluditos.


El hecho de que haya corrupción no quiere decir que haya un país corrupto debajo. Me parece que hay una cierta percepción social hipertrófica y exagerada del nivel de corrupción que hay.

¿Cómo lo dejamos? ¿Gracioso o sinvergüenza? Es que no encuentro palabras para definir semejante desfachatez, propia de alguien que, o no tiene dos dedos de frente, o está convencido de que no los tenemos los demás.
La corrupción campa a sus anchas en todos los estamentos, tanto políticos como judiciales, administrativos, policiales, bancarios, empresariales, asociativos... ¡En todas partes! Y desde el más bajo hasta el más empiringotado. Remedando el Tenorio: "Yo a las cabañas bajé, yo a los palacios subí, yo los claustros escalé y en todas partes dejé memoria amarga de mí".
Por desgracia no es la memoria lo que nos dejan sus canalladas porque siguen en activo aquí y ahora, a pesar de negarlo sin que se les caiga la cara de vergüenza. Siguen activos y con muchas ganas de trincar más sin molestarse en que se sepa, tal es el grado de impunidad con el que se creen revestidos de pies a cabeza al tener la sartén por el mango.


En este sentido, pone como ejemplo el reparto de tiempos en los telediarios y asegura que el 60-70 por ciento está dedicado a los asuntos de corrupción, "muy a menudo para simplemente recordar que están ahí y no para aportar una información nueva".
 
La negrita es mía para resaltar que este tipo espera que se olvide todo, como si fuera cosa de hace cincuenta años... Increíble pero cierto.

"No quiero en absoluto quitarles importancia (a los casos de corrupción), creo que siempre hay que atender la indignación de la sociedad que puede haber sobre estos temas, pero también creo que es adecuado encuadrarlos en la dimensión que tienen y sobre todo no pensar que contagian a toda la clase política o administrativa, sino hacer un análisis más sobrio de lo que representa y valorar qué se está haciendo para prevenirla y para atajarla", concluye.
 
¿Un análisis más sobrio? ¿Nos está llamando borrachuzos el fulano este? Sólo faltaba esto, que crea que todos son de su misma condición. Y conste que no lo digo yo, es una frase hecha y a saber si no va desencaminada a tenor de las sandeces que dice porque a ver, que sepamos, no están haciendo nada para atajar la corrupción, ni de un lado ni del otro, sigue siendo un "vivalavirgen" por todas partes, el tan conocido "Hoy por ti, mañana por mí", el motivo por el cual no se ataja nunca nada, ya que todos trincan sin despeinarse.

¿Hasta cuando?

15 comentarios:

  1. Estoy de La Vanguardia hasta el moño. Si copias y pegas un párrafo suyo te sale debajo el enlace y si lo eliminas antes de publicar, lo que tú hayas redactado a continuación aparece sobre fondo blanco, jodiéndote la entrada.

    Estos párrafos son del enlace que ya he puesto en el titular, así que no me aprovecho de nada. Última vez que uso este periodicucho para mis artículos.

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  2. Este Wert es un sinvergüenza ministro del partido mas corrupto de la historia de España

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    1. Te equivocas, el partido más corrupto de España es el PSOE, el PP es reciente en la Historia, apenas tiene dos telediarios.
      A cada uno lo suyo.

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  3. Aviso para los guirihablantes que me inundan el blog de comentarios altamente sospechosos:

    Todos van a parar a la basura.

    Dice cierto amigo que sólo pretenden hacer ver su blog o página, o sea, spam. Pues vale lo mismo: a tomar viento.

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  4. Este WERTY es un imbécil.
    Tiene que haber en el gobierno de España imbéciles, memos, defraudadores, mentirosos, incapaces y estafadores.
    Este tiene el Guiness de los imbéciles.

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    1. Hombre, creo que el galardón lo ostenta todavía Pepiño y no es fácil arrebatárselo, no.

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  5. Le escuché ayer a la noche, y su argumentación tiene su lógica.

    Sin embargo, son tal la cantidad de casos de corrupción abiertos y tenemos tan poca memoria que no está de más que nos la refresquen continuamente en las noticias. Sobre todo porque son casos que todavía están abiertos y de los cuales queda bastante por saber. Además que lo que ha estado haciendo su partido en cuestión todavía está muy borroso...hay que aclarar demasiadas cosas...

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    1. Bueno, si a mentir le encuentras lógica, pues sí, por completo.

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  6. Teresa, esto no viene a cuento, pero me interesa que lo leas. Es una reflexión que he hecho recientemente. He tenido que beber malos tragos en debates y discusiones con feministas. Esto me ha hecho ver mejor la verdad sobre su sucio movimiento. Suele pasar, pues yo he conocido a gente que se ha hecho fascista radical después de haber recibido clases de profesores profundamente antifascistas. En mi caso, recibo clases de algún que otro profesor profundamente feminista (sí, en masculino, porque hablo tanto de profesores como de profesoras), lo cual ha hecho que se afiancen en mí unas ideas profundamente antifeministas.

    En fin, no me enrollo más. He aquí mi reflexión:

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    Es innegable que el feminismo aplica en su doctrina el principio de doblepensar del que hablaba Orwell.

    Esto se entiende a la perfección con un ejemplo: el feminismo no defiende a la familia tradicional, e incluso la ataca, supongo que considerándola machista, y otras lindezas por el estilo. Ahora bien, cuando ocurre un caso de lo que ellas llaman violencia de género, y una familia normal, con padre, madre e hijos, queda fragmentada, ¡ahí sí que la defienden! Aquí aplican el doblepensar, siendo capaces de mantener en su cabeza dos opiniones contrapuestas, de creer en ellas al mismo tiempo y de no hacerse preguntas al respecto.

    Un ejemplo más claro aún: las feministas protestan contra diversos hechos y actividades considerados por ellas como machistas. Bien. No sé si recordaréis que, en el año 2010, si mal no recuerdo, entre los políticos se abrió el debate de legalizar totalmente la prostitución (como en Holanda). La pregunta que cabe hacerse a este respecto es: ¿existe alguna actividad más denigrante para con el sexo femenino que la prostitución? Sin duda, no. Ahora, el quid de la cuestión: ¿a cuántas feministas habéis oído protestar por semejante debate sobre la legalización de la prostitución? ¿Cuántas de ellas han dicho que Zapatero y la Aguirre son machistas por ello? Aquí también aplican el doblepensar.

    Por esto, para mí, el feminismo no es un movimiento que luche por la igualdad de los géneros (cosa que ya se ha conseguido, por mucho que se empeñen en mantener lo contrario), sino un sucio pilar del marxismo cultural, cuyo objetivo último no es más que la degeneración y la desaparición de la cultura occidental.

    (Nota: he puesto en cursiva las términos neolingüísticos. bb doubleplusgood all hail bb!)

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    1. Por supuesto que me interesa la reflexión a la que has llegado, tanto más cuando la comparto.

      El doblepensar es común a los que el hecho de pensar significa un esfuerzo sobrehumano, o sea, que al no serles tarea fácil, se dispersan y no atinan ni a la de tres.
      Recordemos a las sin par feministas del malhadado Zapatero, De la Vega, Aído, la... la... esa de la cual ya ni recuerdo el nombre, la hija de los sociatas mangantes de Castellón -creo-. Si les preguntaban por qué se permitía a los moros agredir a sus mujeres aquí, en España, te soltaban sin despeinarse: "Son sus costumbres y hay que respetarlas".
      Toma ya, feministas contra los hombres de casa, pero apoyando a los de fuera que les dan votos y sus mujeres no pintan nada.

      El feminismo tuvo su época cuando era necesario, por motivos sociales, pero ya lleva décadas obsoleto por lo que tú mismo dices, que la igualdad está clara, excepto en algunos estamentos, pero esto no tiene que ver en absoluto con lo que hace esta gente, empeñada en usarlo como si estuvieran en el pasado.

      Completamente de acuerdo en que el feminismo actual pretende disolver la familia tradicional y con ello degenerar la sociedad, eliminando los valores éticos y morales, anorreando nuestra cultura a martillazos y patadas.

      No olvidemos que esta gentuza siempre se apropia de lo ajeno para blandir sus postulados hipócritas, falsarios y vómitivos.

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  7. Quizás habría que replantearse seriamente el apedrear a éstos politicastros. Tenemos gobiernos de payasos sobrepagados a punta de pala que, encima meten la mano en la caja más de lo debido. Para colmo sale este menda con que se está sobredimensionando la corrupción. Simplemente es algo inasumible que, hay que atajar de raiz y de inmediato y que, en plabras de Wert, deja bastante a las claras que quien lo lo dice lo es y preocupa y mucho, el cariz negativo, para los politicastros, que poco a poco van tomando las cosas.

    Un saludazo.

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    1. Cierto, parece que por fin se dan cuenta de que no gozan de absoluta impunidad y cada vez más son señalados con el dedo.
      Es buena señal que se pongan nerviosos, a ver si finalmente dejan de mentir y trincar.

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  8. Teresa, vengo a hacer otra reflexión. Sé que no te molesta, y, además, como últimamente estás publicando poco, así nos mantenemos en contacto.

    A ver, ayer fue viernes día 22 de marzo, viernes de Dolores, el último día lectivo del 2º trimestre de este curso académico. Entré al institiuto a 3ª hora.

    A 4ª hora, después del recreo, tenía Ética. Como te puedes imaginar, a mí, con mi profesor de Ética me encanta discutir y debatir. Y bueno, ayer, en una hora en la que no había nada que hacer (y con pocos alumnos, además), tuvo lugar un debate muy intenso, sobre las naciones. ¿Qué es un una nación? Con esa pregunta empezaba el debate. Yo defendía que las naciones eran necesarias para la preservación de los pueblos. Mis adversarios (el profesor y una niña medio espabilada que hay en mi clase) defendían lo que tantísimas veces habrás oído decir a los progres: que todos somos iguales, que es absurdo que haya fronteras y naciones, que las razas no existen, e incluso, que si los pueblos desaparecen mezclándose, no pasa nada.

    He estado comparando este debate con la Batalla del Somme de la Primera Guerra Mundial: una batalla muy larga e intensa, pero que no ganó nadie. Este debate ha sido igual. Un pequeño debate anexo sobre las razas (la raza es parte de la nación) lo he ganado yo de manera pírrica y poco notable, pero el resto del debate fue un intercambio de ideas y argumentos en el que nadie se impuso claramente sobre nadie.

    (Sigo)

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  9. La cuestión sobre la que he reflexionado es que el profesor, así como la niña que estaba de su parte y otra niña más que había escuchando, me tildaron de intransigente y de «cerrado de mente». Esto en principio me dolió, porque no sabía bien qué decir ni qué pensar. Básicamente, el debate estaba en un punto muerto, y yo no cedía en mis convicciones. Claro que ellos tampoco cedían en absoluto, pero, ¿qué iba a hacer? ¿Levantarme, señalarles con el dedo y gritar: «¡Y vosotros más!»? No habría sido convincente ni maduro.

    Ahora, he estado reflexionando sobre esto, y haciendo memoria sobre diversos hechos en el curso, y he llegado a una conclusión sobre las acusaciones que lanzaban contra mí, acusándome de intransigente.

    Veamos, ¿intansigente yo? ¿Y me lo dicen ELLOS? ¡Por Dios, que va a resucitar dentro de 8 días!

    A principios de curso, yo estaba totalmente en contra de la Democracia y de la eutanasia. Mi profesor de Ética, que es, todo sea dicho, un buen filósofo, hizo variar mi forma de pensar, me hizo reflexionar sobre esos dos temas, y hoy día apoyo una Democracia real, como la que había en Estados Unidos antes de la Segunda Guerra Mundial, o en Reino Unido antes también de esa guerra. En cuanto a la eutanasia, a la cual me oponía enérgicamente, ahora tengo una idea más intermedia: si alguien está consciente y sufriendo por estar totalmente limitado o aquejado de grandes dolores, que se le provoque un estado de inconsciencia total y perpetuo, que le proporcionará lo mismo que él busca en la muerte: el fin de su sufrimiento. Por lo demás, que no se le arrebate la vida a nadie. Sólo Dios tiene autoridad para hacer tal cosa.

    A principios de curso, sobre el tema del aborto, yo no apoyaba que una mujer embarazada tras una violación pudiera abortar. Sin embargo, tras una discusión, precisamente, con las dos niñas que he mencionado, empecé a considerar que el hecho de que una mujer se quede embarazada tras una violación es algo tan traumático, y supone un hecho tan desgraciado, que en ese caso (y prácticamente sólo en ese caso) habría que darle la posibilidad de someterse a un aborto, siempre y cuando el tiempo de gestación sea inferior a un mes, claro. Que no se espere a que le venga la regla, porque la regla a lo mejor no le viene.

    Como se puede apreciar, yo los he escuchado en todo momento, y he estado abierto a cambiar mis ideas en base a lo que ellos me decían, y aun así, ¡me llaman intransigente! Pero, ¿sabes qué es lo mejor de todo? ¡QUE ELLOS JAMÁS HAN CAMBIADO SUS IDEAS EN BASE A LOS ARGUMENTOS QUE YO LES HE DADO, QUE ADEMÁS, NO HAN SIDO POCOS! ¡JAMÁS!

    Por lo menos al profesor, todo esto se lo voy a echar en cara, a ver qué tiene que decir. Probablemente se vaya por las ramas, acusándome de hablar con la convicción de que tengo la razón absoluta, y tal...

    En fin, Teresa, ¿qué te parece?

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    1. "Intransigente y cerrado de mente"... Esta argumentación es la que suelen usar para zanjar un debate quienes no encuentran razones para apoyar sus opiniones.

      Has demostrado que te acusan falsamente, puesto que has modificado algunas de tus opiniones debatiendo con ellos, mientras que a la inversa nunca, ¿quien es pues el cerrado de mente?
      Con esta clase de personas no se puede debatir, precisamente, por su intransigencia, por negarse a admitir otras posibilidades que no sean las suyas.

      Y ahora ten en cuenta una cosa muy importante: un filósofo no es nadie extraordinario, es una persona que expresa sus opiniones, como tú las tuyas y yo las mías. Tendrá más estudios, pero nada más porque las opiniones se basan en el raciocinio, en la capacidad de pensar y llegar a conclusiones, no en lo que hayan dicho o dejado de decir otros anteriormente, así que nunca te dejes avasallar por citas o frases rimbombantes porque suele ser la manera de enmascarar su ignorancia en el "aquí y ahora".

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