jueves, 10 de mayo de 2007

HOY HE VOTADO

Se celebran elecciones sindicales. Ya hacía días que me llegaban sobres con propaganda electoral, pero no les hice demasiado caso, todos son igual de inútiles. Incluso olvidé la fecha de las votaciones. Pero esta mañana una compañera me lo ha recordado. Estaba molesta porque a ella le tocaba votar en nuestro centro de trabajo y solo le adjudicaban media hora para ello, mientras que yo debía ir a la Central y disponía de dos horas. He hecho cuentas rápidamente, si iba a votar a última hora, podría salir a las doce en vez de a las dos y media, hora habitual de salida, porque a las doce tenemos la segunda media hora de descanso de la jornada. ¡Waooooooooooo! Así que he decidido ser una trabajadora ejemplar y depositar mi voto. En eso que caigo en la cuenta de que no me he enterado de nada; me llevé los folletos a casa y los dejé ahí olvidados, en el estudio. Pues nada, nada, me voy a buscar al oficial del cual soy ayudante normalmente. Hoy no estábamos juntos. Aparezco y le suelto a bocajarro "¿A quien voto?" La verdad, ni se ha inmutado, ya me conoce de sobras, pasamos muchas horas juntos. Lo primero que me dice con determinación es "A CCOO no", para añadir enseguida "Y a UGT tampoco" A continuación se ha quedado pensativo, dudaba... Yo pensaba "Venga, suelta ya a quien quieres que vote", je je je... Me ha nombrado dos o tres sindicatos y entonces he pillado a un enlace sindical que pasaba por allí. No le conocía de nada, que los que tenemos en el pabellón hace semanas que se han perdido de vista, pero bueno, para informarme ya servía. Dos o tres preguntas concretas y recibo respuestas rotundas. Gracias, chaval. Me voy a buscar al jefe, cruzando los dedos para que se entere de lo que le digo, que una hora antes ya tuve problemas cuándo le buscaba para notificarle que nos habían colado un envío ajeno y que borrase las diecinueve masai adjudicadas a la línea 1, que no eran para nosotros. La bofetada a ginebra que recibí y los ojos vidriosos me obligaron a explicárselo tres veces, poquito a poco, como a un niño pequeño. Estaba charlando con Mariangeles (la que votaba allí) y Rafa, el que me ayudó a cazar a Negret en el safari que monté hace casi un año. Eufórico, estaba que se salía de gracioso... A Mariangeles no paraba de pellizcarle la mejilla que le dejó los dedos marcados. A mí me echó las manos al cuello y de poco no se lleva una patá en los webos por muy jefe que sea. Rafa se interesaba muchisímo por los paquetes que Melchor estaba clasificando allí al lado, je je je... Total, que por muy borrachín que sea, les ha tomado el pelo a todos los agentes. Les ha emplazado a volver después de votar para firmar la salida. Y que estuviesen de vuelta al cabo de una hora, nada de las dos horas reglamentarias... Conmigo no ha podido, le he dicho que el sindicalista me lo ha dejado claro: podía irme a las doce y no volver ya, eso sí, firmando la salida antes. Ha intentado imponerse como con los demás, pero no he cedido y ha claudicado porque sabe que tengo razón. Como ellos se callan y acatan, así les va. Eso sí, no me ha dejado firmar la salida. Como tenga problemas por ello (pueden acusarme de abandono del puesto de trabajo), se va a enterar de quien es Leona Catalana. He ido andando, la Central está a cosa de kilometro y medio. Un agradable paseo: el monumento a Colón, la Capitánia General, el final de las Ramblas, los guiris, algunos ya como gambas al ajillo... Un par de marineros extranjeros, de piel oscura, resaltando el uniforme blanco impoluto; caminaban delante mío y no les sentaba nada bien el uniforme, tenían los hombros caídos. En el Ministerio de Defensa había un soldado plantado ante la puerta, chulo él, con las piernas abiertas y los brazos en jarras. A este sí le sentaba bien el uniforme de camuflaje, je je je... Yo llevaba el mío, azul eléctrico por mi categoria, ¡menos mal que no estoy en otra, la camisa amarillo limón con chaleco azul marino son horribles! Detesto las camisas, me encanta mi guerrera azul. Abreviando, Leona, que te enrollas. Pues eso, que llego a la Central y enseguida he recordado la famosa ley de Igualdad, ¡ja ja ja ja! La mesa estaba compuesta por ¡ocho! mujeres. Y un hombre. Pobrecillo... Y es que incluso el servicio de orden e información estaba compuesto exclusivamente por mujeres. Tiembla, ZP, que te has metido en un buen berenjenal.

4 comentarios:

  1. Bienviguda, wellcome (creo), bienvenida. ¡Esos arrebatossss!

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  2. Las mujeres al poder.

    Si las mujeres mandaran ...

    Zapatero, eres un solete...

    José Luis Rodríguez, I love you

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  3. http://www.quediario.com/blogs/21335/

    This is my adress

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